Las otras crónicas

Consulta el índice de todas las crónicas por autor

Wednesday, March 09, 2005

Héroe surreal

Obed Collado

Briago.
Eso es lo normal para el tío Lalo. Ser y estar.
Para él, exceso es no brindarle al cuerpo el vital líquido: alcohol.
Normalmente no causa problemas a terceros, siempre y cuando no esté al volante de alguno de sus carros, que tanto adora.
Le gusta humillar al transeúnte, no con el lujo que se refleja en la pintura metálica de sus autos, ni con el retumbante y explosivo sonido de sus autoestéreos. Ni con el rugir de sus motores “tuneados”.
Cuando el tío Lalo se monta en sus “carruajes” (así les llama), los peatones se convierten en gallinas asustadizas y los automovilistas en víctimas de una persecución atroz (emulando la que ocurre en su película favorita: Contacto en Francia)
Ya no sé qué recomendarle. Si le pido que no beba, me retira el habla, y si le digo que no maneje ebrio, se aguanta las ganas de madrearme.
En una de tantas, el destino no le permitió salirse con la suya (como siempre hace).
Un valiente ciclista invirtió los papeles. Para su fortuna, el tío Lalo no es un asesino.
La bicicleta retorcida era como una radiografía del ciclista, quien quedó con cara de perplejo en el asfalto. Lo vieron los patrulleros que aparecieron de la nada.
Se acercaron. El copiloto bajó del vehículo y echó un rápido vistazo al ciclista.
No ameritó ningún tipo de gesto de parte del agente.
El tío Lalo respondió al tercer “joven” emitido por el patrullero.
-Sus papeles.
-Eh!?
-¡Sus pa-pe-les!
-Ah, sí...
Buscó, pero la verdad es que nunca llevaba consigo nada. Ni la licencia.
El “poli” pronunció el clásico: “¿Cómo le hacemos?”. El tío sólo levantó los hombros.
A pesar de lo ocurrido, el motor del flamante auto seguía prendido.
No lo pensó más. En un acto reflejo se echó un reversazo, maniobró como experto héroe de película y se dio a la fuga.
La persecución alcanzó el Periférico. Para entonces, tres patrullas iban tras él, como si debiera muchas vidas y hubiese vendido toneladas de cocaína.
El tío Lalo se divertía como nunca. Para hacer más emocionante la carrera comenzó a “pegarse” a cuanto auto le caía mal.
La verdad la historia tuvo un final no tan malo. Acabó en el hospital.
Regresemos al Periférico. Ya había perdido a los policías cuando un auténtico psicópata del volante se le puso al tú por tú.
De todas las películas que había visto el ebrio de mi tío, sólo una le asustaba. Esa donde un tráiler persigue a un tipo común y corriente y no lo deja ni descansar.
Pues ese tráiler se le apareció. Y ésa casi no la cuenta.
Tuvo que usar todo lo aprendido a lo largo de tantos y tantos años de chupar y manejar.
El tráiler asesino casi ocasiona una carambola que hubiera cobrado muchas vidas (como esa de Fatal Destination 2, que gustó mucho al tío, pero no le espantó).
Las hábiles maniobras del tío Lalo evitaron la masacre. El tráiler terminó en un trágico estallido, que afortunadamente ocurrió lo suficientemente alejado de otros automóviles como para causar daño.
Lalo había salvado muchas vidas y casi perdido la suya.
Los policías que registraron el incidente fueron otros, distintos a los aparecidos.
El alcohol se había evaporado de la sangre del tío.
Así que un ebrio indomable acabó siendo un héroe en un día por demás irreal o surreal, o como quieran llamarlo.
La aventura habría sido mejor si el compadre de mi tío Lalo hubiera estado aquí, pero, el muy narco se fue a atender “bisnes” al vecino país del norte.
El Oaxaco, como lo llaman en el bajo mundo (también en el alto) seguramente habría hecho un mejor relato de esta estúpida e inverísimil historia. Hasta le habría agregado alguna extraña y mística conexión con la costa oaxaqueña y tendría un final más trágico. Con muerte del compadre Lalo incluida.
Tendrán que conformarse con mi relato, que en verdad ocurrió.

Nota: En la crónica publicada en El Sol no se incluyó el párrafo sobre el Oaxaco. Cuestión de espacio.

2 Comments:

  • Bueno, nadamás faltan las preciosas cámaras del carnal Gus para completar esta imaginada secuencia... Creo que con una pequeña crónica de sus sucias vidas podríamos ya de plano en ir pensando en un largo...

    By Anonymous Anonymous, at 4:52 PM  

  • chále! a lo mejor era Lola la trai-
    lera,la que manejaba el trailer!

    By Anonymous Anonymous, at 7:05 PM  

Post a Comment

<< Home


 

Click Here